domingo, 12 de mayo de 2013

Percibiendo.


Mi otra vida me llama, mi otra vida que ya paso. Me llama mi otra vida, futura la muerte me acecha en lugares como este. El campo verde, los sonidos de la lluvia, la suave melancolía que se puede percibir en el sulfurante aire catedrático, que transita mi nariz.
Es demasiado, demasiado poco lo que entiendo de la vida, que se supone debo de vivir. No recuerdo porque estoy aquí no recuerdo en que me convertí. Alguien me acompaña día y noche y no le logro ver, no comprendo no sé quién es él. Sería ingenuo pensar que un ángel, más diabólico pensar que es un demonio.
 Me parece que no comprender se ha vuelto racional, y normal. Pero esos recuerdos que continuamente me asechan vienen, y se van. Como si fuesen traídos por alguna extraña fuerza distinta a la mía he incompatible con mi vista, por lo menos en este mundo. Es el mundo en el que estoy el que no me deja opción, de la percepción que obtengo; de los utópicos lugares perfectos, que aparecen en mis sueños lucidos como el día.
 Es una percepción humana, infraganti; decente de que no hay más allá y de que si hay, pues no está acá.
Es curioso como suelo recordar aquel vaivén como si aún estuviera aquí, quizá todos pertenecemos a la misma dimensión, y quizá el pasado y el futuro forman el presente, o quizá más racionalmente el presente y el pasado conformen un futuro.
Recuerdo cuando caminaba, por el pasto húmedo a causa del rocío, con mi vestido de bodas. Quizá no quería, o quizá simplemente debía de ser así.
Y entonces desperté, en el presente por el que transito diariamente. En mi vida misma, que deja de ser un sueño en un abrir y cerrar de ojos.
Sonaban las láminas de zinc en el alto de aquella casa, y las ramas de los árboles chocaban contra las ventanas produciendo un tenebroso ruido. La noche era espesa, la luna apenas y se asomaba tras una nube que acaparaba la inmensa belleza de la noche, obscura, tal cual sucede cuando no hay luna que alumbre.
Iniciaba con una leve asimilación de aquel sueño y de aquel lugar tan maravilloso, en donde yacía yo, hace cinco segundos. Pero no veía mi figura perfecta, ni el novio perfecto, ni el cielo de azul teñido y me sentía triste. La realidad me acechaba y por más que intentaba librarme de ella, no podía. Suicidarme, no que horror yo era incapaz. Qué pensarían los demás, aunque eso ya no tendría importancia alguna, ya que estaría muerta
Y la muerte, torna nuevamente en lo desconocido, tal vez debería de salir adelante, quizá podía vivir durmiendo para siempre. Hibernando los años que tenga que vivir, o los años que Dios quiera como suelen creer aquellos ingenuos que se amparan en las religiones. Volverme ingenua era mi opción, ingenua he ignorante. Ignoraré toda maldad y repulsión que la sociedad albergue y me volveré ingenua creyendo que todos son de buenos pensamientos. Así quizá cuando alguien este teniendo una risa sarcástica de mi persona, yo lo ignoraré y pensaré que es un chiste, y así cuando alguien planee asesinarme, mi ingenuidad saldrá a flote, y yo no lo abre ni imaginado.

Continuare, con mi inspiración aunque quizá mucho tiempo pasó ya. Pero depende, todo depende, tal cual Jarabe de palo, y así como García Márquez escondió la soledad tras sus 100 años de muerte inesperada, escondo yo mis optimismos en un par de líneas realistas.
Y ahora, seguiré viviendo después de aquel planeado asesinato que me dejo, volver a nacer.
Fue junto con Tomas Moró que creció mi utopía en una vida pasada, y hoy?  Que será hoy de mi utopía, y de la vuestra? Será un precioso paisaje dibujado por Robert Owen, en el cual pondremos nuestro modernismo implícito, y con la ayuda de photoshop pondremos en el nuestra foto. Si esta es la real utopía modernista, que se da a causa de una revolución industrial en el siglo XVII que será del siglo XXI o reitero, que es?. Una futura guerra por agua, un colapso mundial sin Mark Zuckerberg, un libertinaje mundial, un camuflaje de una falsa reedición del Malleus Maleficarum para matar en lugar de quemar, inocentes en vez de brujas. Es sencillo, no es ningún sarcasmo, Bob Marley hoy en día se ha convertido en Manhatma Gandhi.
La literatura tiene precios como para la burguesía, y al proletariado lo mantienen al margen de la realidad mundial y nacional leyendo las falsas noticias de los periódicos amarillistas.
Y entonces se va, se va la vida, cada día, cada minuto, y hasta cada segundo. Pero esto no es importante en el presente del que hablo, esto será importante en un futuro, y cuando este futuro llegue a ser presente ya será demasiado tarde. Y eso que para algunos ya es tarde, ya que ese futuro, es presente, y este del que hablo donde hay un chance, fue pasado y ya paso.
Continuare, en busca de mi optimismo perdido, aunque quizá este esté entre las sabanas de mi cama, simplemente porque ahí sueño, ahí esta mi utopía y ahí también hago el amor. Y no es que tenga sexo, en realidad es que hago el amor. Quizá no muy a menudo, quizá nunca lo he hecho, pero sé, que puedo fantasear con la ingenua perfección de un hombre soñado que pronto va a llegar. Porque ahí está mi optimismo en el amor.
No quiero decir que necesite a un hombre, el amor en realidad, es una eternidad concebida a la muerte, es negar la muerte es querer eternidad. Y lo que deseo más, que nada, o más que todo en realidad. Es la eternidad de una felicidad utópica, quiero un paraíso perdido dibujado,  para que nadie me encuentre, porque mi necesidad es, encontrarme a mí misma, conocerme a mí misma, y si no me conozco ni yo, como me podré presentar. Con mi nombre, pero muchas tienen y tendrán mi nombre, por mi físico, con este solo me reconocerán y este cambia día a día y envejece y algún día se cumplirá una dialectía, planteada en la contracción y en la teoría de un proceso donde todo vuelve a ser vida, pero nada es vida a la vez
Y sucedió, tal cual cita Kansas, todo se convirtió en polvo, polvo en el viento, todo se transformó en nada. Y surge el nadaísmo, y surgen las protestas de manera elocuente y facunda, algo lírica quizá la nueva forma de rebelión. Y prosiguen las guerras y nos idiotizan, y nos transforman en surrealistas, egocentristas víctimas de un sistema capitalista. 
Y así duermo y así despierto, una noche, una madrugada, pesadillas incesantes, y lo peor es que son mi realidad, nuestra realidad, una realidad aceptada por la burguesía y sin remedio para la minoría.

La más larga historia de amor, planeada.

Cuéntame tus secretos, están a salvo en mi memoria,
no padezco mal de alzheimer ni tampoco soy chismosa.
Cuéntame que es lo que haz hecho cada día de tu vida,
cuéntame tus planes futuros, de tus sueños y el amor.

Si tienes planes, para irte lejos, no me digas adiós,
ni me digas tus secretos, creo, es lo mejor.

Vivimos en un mundo lleno de adictos! Solo que algunos se equivocan eligiendo su adicción.
Soy mujer decidida, yo se lo que quiero para mi vida.
Soy mujer ambiciosa, siempre quiero más de una cosa.
Soy mujer peculiar, nunca busco a alguien singular.
Soy mujer feliz, siempre buscando como sonreír.
Soy mujer entre mujeres, soy persona entre personas,
Soy una vida presente, entre las muchas.Y una, segura, futura muerte al igual que todas.
Soy o no soy? ese no es mi dilema Shakespeare.
Soy lo que como, lo que leo, lo que pienso, lo que hago, lo que sueño, soy todo lo anterior.
No soy lo que desconocidos piensan, y DICEN que soy.
Soy soñadora, por supuesto,
y muchas veces hasta mago,
pues de la nada aparezco y desaparezco.
Soy aprendiz de la vida, y de la gente,
hasta autodidacta de repente.
Soy mujer aventurera Pedro Fernández, y sustituyo a mil hombres por mis viajes.
-Futura mochilera, de puritico corazón-
Dejadme ir, para volar junto al viento
y algún día regresaré en forma de lienzo.
Dejadme ir, para gozar del más allá,
este no se encuentra por acá.
Dejadme ir para ablandar este corazón,
iluso con poder volar,
y encerrado dentro de un cuerpo de cristal.
Dejadme ir amor, me limitas.
DEBERÍAN DE ENSEÑAR A AMAR EN LIBERTAD.
Abriré mis alas, cerrare mis ojos emprenderé viaje, 
junto con el viento.
La ambición es parte de muchos de nosotros! Siempre queremos más, y de lo mejor. 
Únicamente quienes se dan cuenta de que la felicidad, no depende de la cantidad, buscan la medida exacta. 
Únicamente quienes han visto con sus propios ojos la realidad del mundo, saben que una balanza sería la herramienta primordial para la humanidad. 
Realidad ilusa, te invitaré a soñar una vez más!
Contigo voy, contigo vengo, llévame a un desierto.
Donde se sequen las penas, y se entierren estas bajo dunas de arena.
Nada- Todo- Nunca- Siempre
Usted habla español.
Yo también lo hablo!
Porqué será que no nos entendemos??

Y si inventamos juntos un nuevo idioma?..... 
En donde las miradas hablen, 
en donde los dos callemos
en donde usted y yo nos comprendamos mutuamente.

Vamos, inventemos lo, no puede ser tan difícil,
si empezamos volando juntos!

Infinito verde, que te quiero verde.

Y yace bajo mi, un manto de verde inagotable. 
Y a mi alrededor, el hermoso canto de un jilguero resuena.

El río que fluye, y su catarata, me arrastran en un trance de enamoramiento profundo 

Los grillos cantan junto a las cigarras.
Las nubes bajan cubriendo el estrépito bosque majestuoso, que diviso, y se nota tan cerca, pero camino y no llego.
No le alcanzo, ni lo lograré hacer, porque me encuentro dentro de él!

Y deseo más que nada que me tome en sus brazos, y que nunca me deje salir de acá.
Porque le necesito, necesito su paz, su abrigo, y su sabiduría.
La misma que se encuentra entre los miles de años que ha perdurado.
Sus viejos árboles me cuentan mágicas y secretas historias.

Suave llovizna que acaricia mi rostro,
tenue anochecer, bienvenido.
Infinita es la noche para quienes cuentan las estrellas.